Cada día la distancia parece aún mayor. Lejos de acercar las posiciones entre el kirchnerismo y el "albertismo", el oficialismo profundiza su interna política. Varios dirigentes del Frente de Todos suponían que el Día de la Memoria, que se celebrará mañana, sería un motivo de unión entre las partes; sin embargo, el presidente, Alberto Fernández, encabezará un acto propio, una horas antes de la marcha de "La Cámpora"
De este modo crece la escalada de tensiones en el oficialismo. Fernández resolvió encabezar un homenaje a científicos desaparecidos. El acto se realizará en el Ministerio de Ciencia y Tecnología junto a Daniel Filmus. Será a las 10, es decir, cuatro horas antes de la movilización que planea el kirchnerismo junto a organizaciones de DD.HH., desde en la ex ESMA a la Plaza de Mayo.
La interna feroz
"El Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia" llega en un momento en que la coalición de gobierno está en su peor momento. Los actos dejarán en evidencia las diferencias internas en el oficialismo. Cada día parecen más irreconciliables a pesar de los pedidos de unidad por parte de algunos actores del espacio.
Fernández tomará distancia de la movilización que organiza La Cámpora desde la ex Esma hacia la Plaza de Mayo junto la Asociación de Madres que conduce Hebe de Bonafini. Ayer, la vicepresidenta, Cristina Kirchner, se reunió con Bonafini en la sede de la organización. En tanto, el Presidente eligió encabezar un acto propio: recordará la trágica fecha en un homenaje a científicos desaparecidos que se realizará en el Ministerio de Ciencia y Tecnología.
Convenio oficial
Desde las filas de Máximo Kirchner intentará mostrar poder político de convocatoria para reforzar la postura de rechazo al acuerdo con el FMI, que es ley. Por su parte, Fernández seguirá con una actividad en la misma línea durante el resto de la semana. En la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), firmará un convenio con la Casa de la Moneda para digitalizar sus archivos y ponerlos a disposición de los organismos de Derechos Humanos.
La Cámpora prepara otro tipo de ceremonia, multitudinaria, a través de una marcha de proporciones que auguran inéditas para la fecha. En la Plaza de Mayo, Máximo Kirchner planea llegar a pie junto a la masa luego de una procesión de 13 kilómetros, se habrá montado un escenario. Pero todavía no está decidido si los dirigentes políticos hablarán desde allí, o se priorizarán los discursos de los representantes de los organismos de Derechos Humanos afines. Tampoco está descartada la presencia de Cristina Kirchner, que usualmente deja hasta último momento la confirmación de sus apariciones.